Revelando formulaciones de detergente para lavadora

Al desarrollar un detergente para lavadora, los especialistas en fórmulas se enfrentan a algunas situaciones que parecen un callejón sin salida. Los consumidores suelen buscar características que no siempre son las ideales para el rendimiento del producto. Esto se debe a factores culturales y movimientos de influenciadores digitales que acaban insertando en el mercado algunos conceptos y análisis muy superficiales y limitados, que refuerzan creencias como el uso de bicarbonato, alcohol y vinagre como soluciones mágicas.

Pero más allá de las modas, es esencial una sólida base conceptual. Esto permite incorporar atractivos de etiquetado y atributos técnicos específicos sin comprometer la eficacia y la calidad del producto.

Para entenderlo mejor, lea primero el artículo sobre detergentes lavavajillas. En él, exploramos conceptos cruciales para cualquier formulación de detergente que implique espuma y viscosidad.

Basándose en estos principios, un detergente para lavadora no es más que una variación del tema del lavavajillas. La composición básica es similar, pero añadimos insumos para conseguir características técnicas específicas para esta aplicación.

¿Cuáles son estas características?

Humectación

El producto debe tener una buena capacidad humectante, es decir, debe mojar la ropa en profundidad, penetrando en las fibras textiles para actuar en cada filamento. Una buena humectación garantiza una limpieza más eficaz, actuando en profundidad y no sólo en la superficie.

Los tensioactivos aniónicos como el Ácido Sulfónico y el Lauril Éter Sulfato de Sodio, aunque no siempre son los mejores agentes limpiadores para algunos tipos de suciedad, especialmente la suciedad pesada, son excelentes agentes humectantes para esta aplicación, además de tener un coste relativamente bajo para esta función dentro de la formulación.

Espuma

La espuma es un factor cultural importante porque, a pesar de ser valorada por los consumidores, no ayuda a la limpieza e incluso puede perjudicarla. Durante el lavado automático, la ropa choca, generando una fricción que aumenta la capacidad de limpieza. Este proceso puede explicarse mediante el Círculo de Sinner. Haga clic aquí para saber más.

Sin embargo, la espuma amortigua los golpes, reduce la fricción y perjudica el rendimiento. Por eso, en un detergente para lavadora hay que controlar la espuma: debe estar presente como señal para el consumidor, pero sin poner en peligro la limpieza. Buscamos una espuma con buen volumen, pero que sea inestable y se deshaga fácilmente para no reducir el movimiento de las prendas durante el lavado.

Para controlar la espuma, hay que prestar atención a la proporción de Ácido Sulfónico y Lauril Éter Sulfato Sódico. La proporción ideal para la estabilidad de la espuma es un 70% de Ácido Sulfónico y un 30% de Lauril Éter Sulfato Sódico. Para un detergente de ropa, hay que reducir la estabilidad de la espuma aumentando la proporción de Ácido Sulfónico (por ejemplo, 80% de Ácido Sulfónico y 20% de Lauril Éter Sulfato Sódico).

Aún más importante es añadir un tensioactivo no iónico a la formulación.
Alteran el comportamiento de la espuma, reduciendo su estabilidad y aportando otros beneficios a la limpieza. El Nonilfenol 9.5EO es un ejemplo, pero Macler ha eliminado este tensioactivo de su cartera porque es extremadamente perjudicial para el medio ambiente. Haga clic aquí para obtener más información.

Existen opciones con mejor rendimiento, rentabilidad y menor impacto ambiental, como Berol 175, un tensioactivo de origen vegetal fabricado por Nouryon y distribuido por Macler en Brasil.

Anti-redeposición
Durante el proceso de lavado, la suciedad eliminada permanece en contacto con la ropa. Como consecuencia, las pequeñas partículas de suciedad eliminadas para el baño pueden volver a aglutinarse durante este proceso y depositarse de nuevo en las fibras. Por ello, es importante incluir agentes antirredeposición en la formulación.

Los tensioactivos no iónicos etoxilados ayudan a evitar la redeposición, tanto por su capacidad para estabilizar la emulsión generada durante la limpieza como por su parte etoxilada, que actúa como dispersante, impidiendo que la suciedad se vuelva a aglutinar.

Otro componente eficaz es el Poliacrilato de Sodio, que tiene un gran poder dispersante. La diferencia en el rendimiento de limpieza de un detergente para lavadora con y sin este agente es notable. Sin embargo, es un producto sintético, lo que puede dificultar las formulaciones con aplicaciones más sostenibles.

En estos casos, los agentes quelantes biodegradables de origen vegetal pueden ser una opción, como Dissolvine GL-47S, fabricado por Nouryon y distribuido por Macler en Brasil. Además de proteger los activos aniónicos, las fragancias y los colorantes contra iones metálicos como el Calcio, el Magnesio y el Hierro, actúa como agente de suspensión y dispersión. Haga clic aquí para obtener más información sobre esta solución.

Descargue la guía de formulación básica de detergente para lavadora

Al igual que en el artículo sobre el detergente Lavavajillas, Macler ha preparado una guía con las indicaciones de dosificación y las opciones de producto que deben utilizarse al desarrollar las formulaciones.

Con esta guía, esperamos ayudar a los formuladores a desarrollar detergentes para ropa eficientes e innovadores.

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